El acné es una afección cutánea común que afecta a millones de personas en todo el mundo, independientemente de su edad, género o tipo de piel. Esta condición se desarrolla cuando los folículos pilosos de la piel se obstruyen con sebo y células muertas de la piel, dando lugar a espinillas, puntos negros y pústulas. Aunque el acné es más común en la adolescencia debido a los cambios hormonales, también puede afectar a adultos, causando incomodidad y afectando la autoestima. En este artículo, exploraremos los diferentes tipos de acné y las recomendaciones de los dermatólogos para tratarlo.
Paso 1: Limpieza | Paso 2: Hidratación | Paso 3: Tratamiento On-Spot | Paso 4: Protección Solar |
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¿Cuáles son las causas del acné?
El acné se desarrolla cuando los poros de la piel se obstruyen con sebo (un tipo de aceite producido por las glándulas sebáceas de la piel) y células muertas de la piel. Esta obstrucción puede deberse a varios factores, incluyendo:
- Cambios hormonales
- Exceso de producción de sebo
- Células muertas de la piel
- Bacterias
- Factores genéticos
- Estrés
Tipos de acné
Existen varios tipos de acné, que varían en gravedad y síntomas:
Acné comedónico
Este tipo se caracteriza por la presencia de comedones abiertos (puntos negros) y comedones cerrados (espinillas blancas). Estos ocurren cuando los folículos pilosos se obstruyen con sebo y células de piel muerta.
Acné inflamatorio
En este caso, las espinillas se inflaman y se vuelven rojas y dolorosas. Pueden convertirse en pápulas (protuberancias rosadas) o pústulas (protuberancias llenas de pus) si la inflamación es más intensa.
Acné quístico
Esta forma grave de acné implica nódulos profundos debajo de la piel y quistes llenos de pus. Estas lesiones son dolorosas y pueden causar cicatrices permanentes si no se tratan adecuadamente.
Acné fúngico
El acné fúngico, también conocido como foliculitis fúngica, es una afección de la piel que se desarrolla cuando los folículos pilosos se inflaman debido a una infección por hongos. A diferencia del acné común, que generalmente es causado por la obstrucción de los poros debido al exceso de sebo y células muertas de la piel, el acné fúngico es el resultado de una infección por hongos en los folículos pilosos.
Aunque no se trata técnicamente de un tipo de acné, mucha gente confunde esta afección con el acné.
¿Qué recomiendan los dermatólogos para el acné?
Los dermatólogos sugieren una serie de estrategias para tratar el acné, adaptadas a la gravedad de la condición:
- Limpieza regular: Es fundamental mantener la piel limpia para prevenir la acumulación de sebo y células muertas. Se recomienda lavar la cara con un limpiador suave dos veces al día.
- Uso de productos específicos: Los dermatólogos pueden recomendar productos con ingredientes como el ácido salicílico o el peróxido de benzoílo para controlar el acné. Estos ingredientes ayudan a desbloquear los poros y reducir la inflamación.
- Prescripción de medicamentos: Para casos más severos, los dermatólogos pueden recetar medicamentos tópicos o incluso medicamentos orales como antibióticos o isotretinoína para controlar el acné desde adentro.
- Procedimientos dermatológicos: Los tratamientos como peelings químicos, microdermoabrasión y terapia con láser pueden ayudar a mejorar la apariencia de la piel y reducir el acné persistente.
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POR CLAUDIA GONZÁLEZ
¿Cuáles son las mejores cremas y tratamientos anti-acné?
El tratamiento para el acné dependerá en gran medida del tipo de acné y de su causa. Los dermatólogos cuentan con un arsenal de opciones para tratar el acné, que varían en función de la gravedad de la afección. Estas son algunas de las mejores cremas y tratamientos para el acné, basados en la información proporcionada por dermatólogos expertos:
Para el acné leve (puntos negros y pequeñas espinillas)
Para el acné leve, los dermatólogos suelen recomendar tratamientos tópicos como el peróxido de benzoílo, el ácido salicílico o productos que contengan retinoides como el adapaleno.
- El peróxido de benzoílo ayuda a eliminar las bacterias responsables del acné, reducir el enrojecimiento y exfoliar las células muertas de la piel. Algunas cremas con peróxido de benzoílo se pueden adquirir sin receta (como Peroxiben de Isdin)
- El ácido salicílico permite limpiar los poros profundamente y regular la producción de grasa. Se puede conseguir sin receta en perfumerías y tiendas de belleza
- Los retinoides, derivados de la vitamina A, son eficaces para eliminar las células superficiales de la piel, destapar los poros e incluso pueden ayudar a eliminar las manchas y marcas que deja el acné. Mientras que el retinol está disponible sin receta, existen otros retinoides más potentes que necesitan ser recetados por un médico para su uso adecuado.
- Ingredientes naturales como el aceite de árbol de té también pueden ser beneficiosos, pero deben usarse con mucha precaución.
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Para el acné moderado a grave (poros obstruidos, imperfecciones y nódulos)
En casos de acné moderado a grave, los dermatólogos suelen combinar tratamientos tópicos con antibióticos orales como la doxiciclina. Los antibióticos orales ayudan a matar las bacterias que causan los granos y a reducir la inflamación. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los antibióticos orales pueden aumentar la sensibilidad de la piel a la luz solar y, con el tiempo, la bacteria puede desarrollar resistencia, lo que disminuye la eficacia del tratamiento.
Para el acné grave o quístico (afecta todo el rostro con quistes/nódulos)
En casos de acné grave o quístico, los dermatólogos pueden recetar un tratamiento muy potente llamado isotretinoína (Accutane). Este medicamento se enfoca en reducir la producción de sebo y puede ser eficaz incluso para los casos de acné más graves. Sin embargo, la isotretinoína puede tener efectos secundarios graves, incluyendo sequedad extrema de la piel y los labios, y sensibilidad al sol. Se prescribe con extrema precaución y los pacientes deben someterse a análisis de sangre regulares para supervisar la respuesta del cuerpo al tratamiento.
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